¡Hola! Bueno vuelvo con otra opinión sobre Lisboa, jejeje, que la semana que fuimos dio para mucho, además que es una ciudad preciosa y merece comentarlo para que vayáis a verla!
Os voy a hablar sobre Belém, uno de los barrios más importantes y famosos de Lisboa, que os recomiendo ir a ver porque es increíble. Si tenéis oportunidad deberíais ir en domingo, nosotros lo hicimos porque casi todos los museos son gratis el domingo por la mañana, así que os ahorraréis un buen dinero.
Contenido de la Guía
Ruta por el Barrio de Belém en Lisboa
Comenzamos con cómo llegar, nosotros cogimos el metro en Marqués de Pombal, la estación de nuestro hotel, y cogimos la línea azul hasta Baixa-Chiado, donde hacíamos correspondencia con la línea verde hasta Cais do Sodré, que es donde se cogen los trenes (allí se llaman comboios).
Para llegar a Belem hay que coger la línea que también llega a Carcavelos, Cascais y Estoril, no se tarda demasiado tiempo y se hace ameno porque vas viendo el paisaje.
Hay que tener cuidado al coger el tren, porque hay cuatro tipos, uno que para en todas las estaciones y los demás paran en algunas, no en todas, así que preguntad antes de subir o mirad bien el cartel luminoso en el tren.
Los billetes sencillos para ir a Belem cuestan 1’20 euros en las máquinas o en las taquillas, pero si vais a coger varias veces esa misma línea, para ir a la playa o visitar más sitios, os recomiendo que compréis un billete de 10 viajes, que se vende sólo en las taquillas, porque os saldrá mucho más barato.
Una vez que lleguéis a Belem hay un puesto de información en la Praça Alfonso de Alburquerque, que está al lado de la estación de tren, donde os pueden dar mapas e indicaros los sitios más interesantes para ver. Nosotros elegimos los sitios donde íbamos a ir desde Madrid, pero os voy a contar los más interesantes y bonitos, porque hay algunos que no merecen mucho la pena, la verdad…
En la misma plaza está el Museo dos Coches, que es una colección de carrozas y coches reales de hace varios siglos. Tiene bastantes y la verdad que a mí me impresionó muchísimo, porque nunca había visto algo parecido. Es un museo precioso que sin duda merece la pena ver.
Después subimos una cuesta enorme para ir a ver la Igreja Memoria, que no pudimos ver porque estaba en obras :S y de ahí, ya que estábamos fuimos a ver el estadio de los belenenses, el equipo de allí, jejeje.
Luego bajamos dando un paseo hasta la orilla del mar para ver la Torre de Belem, que es una torre que está metida dentro del mar y de la playa, es alucinante!!! Tiene tres pisos y unas vistas increíbles, no sé cómo explicaros lo bonita que es, además tiene hasta calabozos donde se metían a los presos, jejeje. Si vais a Belem es una visita obligada.
Después de ver la Torre fuimos a comer a un chiringuito con vistas al mar, algo rapidito para seguir la visita, jejeje. Una vez comimos fuimos paseando hasta el Monumento de los Descubridores, que es impresionante, parece como un barco con figuras subidas y mirando al horizonte, se puede subir del todo en ascensor y ver las vistas desde los 60 metros que tiene! Se ve la ciudad entera por un lado y el mar y el Puente del 25 de septiembre al otro lado. También te ofrecen la posibilidad de ver películas con las historia del monumento, etc.
Justo enfrente de este monumento se encuentra el Monasterio de San Jerónimo, que está compuesto por la Iglesia de San Jerónimo y el Museo Arqueológico. Ambos merecen la pena ser vistos, pero el edificio por fuera es increíble, ya colgaré unas fotos para que lo veáis todo. Además, en los alrededores del Monasterio está la Praça do Imperio, que es un jardín muy grande y muy bonito, donde se puede descansar un poco de la visita.
Cuando fuimos coincidió que había un mercadillo con antigüedades que estaba llenísimo de gente, no sé si era puntual o lo ponen cada domingo la verdad, pero echadle un vistazo porque tenías verdaderas gangas.
Ya por la tarde y después de ver todo esto, andamos un poquito hasta la Antiga Casa des Pasteis, que es la pastelería más famosa de la ciudad, está fundada en 1837 y vayas a la hora del día que vayas está llenísima. Tenéis que probar los pastelitos que venden (creo recordar que eran a 0’90€ cada uno), son de hojaldre y están rellenos de crema, son lo más típico de allí, también os pondré fotito para daros envidia a los más golosos, jejejeje.
Y después de esto ya nos volvimos al hotel a descansar un rato porque estábamos destrozados después de andar todo el día! Jejeje.
La Torre de Belém
Este es uno de los más emblemáticos monumentos que posee Lisboa. Consta de una fortaleza cerca de la orilla del mar construida en piedra maciza . Es impresionante por su situación, casi aislada cuando sube la marea, y su peculiar puente levadizo (con todo lujo de detalles y en perfecto estado de conservación)
La Torre de Belém, Consta de cinco plantas unidas por una escalera de caracol de de piedra y considerable inclinación.A esto hay que unirle que es la única forma de acceso a una planta a otra y que apenas caben dos personas….con lo que, unido todo estos factores, la ascensión y el descenso de la misma se hace una ardua tarea para los turistas (yo en concreto…que mal lo pasé!jejeje menuda claustrofobia!!!
Desde la Terraza Superior se respira aire intenso y las gaviotas parecen «jugar o acechar» a los turistas realizando vuelos rasantes sobre sus cabezas. Todo lo que desde esa altura se ve es grandioso: Se aprecia todo el puerto, el Monumento a los Conquistadores, el Puente 25 de Abril y los Jardines Reales, entre otras cosas.
También son de destacar los sótanos: En ellos se palpa la humedad ambiental y, en casi pleno invierno era insoportable estar allí del calor que hacía. Esta zona era la dedicada a ser la zona de armas y está dispuesta de cañones reales de la época, municiones…etc. Muy interesante y en muy buenas condiciones de conservación
Bueno, espero que os haya gustado y que os sirva de ayuda si vais a Belem, que como ya sabéis os lo recomiendo sin duda.
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