Catedral Doumo y Baptisterio

Continuando con la ciudad de Pisa, voy a hablaros hoy de más lugares de interés que visité durante mi viaje a esa ciudad.

La Piazza dei Miracoli es una zona situada en el centro de la ciudad y amurallada desde tiempos medievales que es donde hunde sus raíces. Actualmente forma parte del Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO y allí encontramos algunos edificios religiosos sorprendentes por tamaño, a saber la Catedral o Duomo que es el centro y que pertenece a la edad media, el campanario o Torre Inclinada que probablemente es la más conocida de todos, el Baptisterio y el Camposanto rodeados de zonas de hierba y otras de asfalto.

• La Catedral: Se empezó a construir a principios del siglo XI. Tiene una fachada impresionante en mármol gris de Carrara, con lo que se consiguen efectos cromáticos bastante impactantes y piedra con enormes arcadas. En el interior podemos ver que consta de cinco naves (la central más cuatro laterales), pero lo que más impresiona es la luminosidad interior, conseguida a través de sus numerosos ventanales y el púlpito, por su indudable belleza artística. Es de estilo románico, aunque tengo que decir que es diferente al español, ya que es mucho más vistoso.
• Torre Inclinada: Es el campanario de la catedral y tardaron en construirla dos siglos por motivos bélicos. Los problemas de la inclinación surgieron al principio de la obra, cuando se terminó la tercera planta, posiblemente por un problema en la cimentación y del terreno, no es algo que surgiese a posteriori. Tiene una altura que supera los cincuenta metros en ocho pisos. La primera planta es de mármol y se sube al campanario a través de una escalera de caracol. Es de estilo románico, aunque el campanario es gótico y consta de siete campanas. Resulta impresionante verla y notar su inclinación tan evidente.
• El Baptisterio, que se empezó a construir a principios del siglo XII. La planta es circular y la decoración es similar a la de la Catedral, destacando por su belleza los capiteles y el mármol de Carrara utilizado en su construcción. Tiene dos plantas Aunque el estilo imperante es el románico, tiene adornos góticos que se le añadieron un siglo más tarde.
• El Camposanto: Se trata de un espacio abierto de forma rectangular, delimitado por una arquería de estilo gótico. Fue construido entre los siglos XIII al XV y su construcción fue motivada por la necesidad de agrupar las diferentes tumbas que había hasta entonces en la Catedral.

Sin duda alguna, el edificio más emblemático de la ciudad de Pisa es su famosa torre inclinada pero no hay que irse muy lejos de ella para poder disfrutar en esa ciudad de edificios tan interesantes como el Duomo o el Baptisterio; de hecho, la torre, que mantiene una identidad propia, fue concebida como campanil del Duomo, al lado del cual se encuentra.

El Duomo comenzó a edificarse en 1064, por Buscheto. Se trata de un precioso templo de estilo románico que cuenta con cuatro galerías de columnas y arcos ciegos. Precisamente, en el arco izquierdo de su fachada está la tumba de Buscheto.

Os destaco algunos detalles que no debéis perderos en la visita a este templo.

• El Portale di San Ranieri: está en el exterior que da a la nave sur.
• Las puertas de bronce, que datan de 1180 y cuentan con bellos relieves.
• El púlpito tallado, de Giovanni Pisano.
• La Tumba del emperador Enrique VII.
• El mosaico de Cristo en todo su esplendor, que se encuentra en el ábside.

A unos pocos metros del Duomo se encuentra el baptisterio, fácilmente reconocible por su forma circular.

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El baptisterio se comenzó a construir en 1152, siguiendo el estilo románico de la época pero no sería hasta un siglo después cuando fue completado pero ya utilizando elementos góticos, mucho más recargados y que poco tenían que ver con el estilo románico de sus inicios.

Si hay algo que destaque en el interior del baptisterio es su púlpito de mármol, esculpido con los relieves de la Natividad, la Adoración de los Reyes Magos, la Entrega, la Crucifixión y el Juicio Final. Al mirarlo, uno no puede imaginar el tiempo y esfuerzo que hubieron de costar en su día para terminar tan impresionante obra.

Este púlpito está soportado por unos pilares que resultan ser unas estatuas de las Virtudes (que nadie haga la gracia…).

La pila bautismal que alberga el baptisterio es de mármol incrustado y data de 1246.

Como podéis comprobar, el Campo dei Mirácoli es algo más que la torre inclinada, por lo que, si viajáis a Pisa, recordad que hay que estar al menos dos días para poder disfrutar de lo más importante que esta ciudad nos ofrece.

Nosotros pudimos visitar la Catedral, el Baptisterio y el Camposanto. Seguro que a cada cual le gustará más unos edificios que otros, pero personalmente guardo más en mi memoria la visita al Camposanto (no os penséis que soy escabroso) pues resulta muy curioso pasearse por allí observando las tremendamente laboriosas tumbas que se distribuyen por el suelo y que recuerdan a quienes allí se encuentran enterrados, en su inmensa mayoría religiosos católicos y algún que otro gobernante. De verdad que son sorprendentes las formas humanas que allí están esculpidas.

Del Baptisterio por ejemplo recuerdo las estrechísimas y oscuras escaleras que subían a la parte superior de donde se disfruta de una buena vista. Y de la Catedral sobre todo la ornamentación interior.

La zona está llena de puestos callejeros para comprar el típico souvenir, pero como el tiempo siempre es escaso y las visitas programadas son muy ajustadas, lo mejor es ver los monumentos y no liarse a ver los puestos, que recuerdo que había por lo menos veinte todos seguidos, y una nube de gente alrededor que favorecía a los carteristas.

Muy cerca del centro encontramos lugares donde comer desde el menú elaborado de restaurante hasta la típica pizza italiana para quienes no quieran gastarse mucho o frutas del tiempo.