Alguna vez creo que os he hablado de mi adicción al chocolate…Desde hace años no puedo pasar ni un sólo día sin probarlo. Me encanta, y todo lo que tenga que ver con él me llama mucho la atención.
Es por ello que hace unos meses, cuando estuve de vacaciones en la costa valenciana, no pude resistirme a visitar el Museo del Chocolate que se encuentra en la localidad de Sueca.
Contenido de la Guía
Museo y fábrica
Y es que tiene esta doble naturaleza. Por un lado es museo, y aprenderemos todo lo relacionado con este rico manjar así como su historia, y por otro lado, tendremos acceso a una fábrica de chocolate tradicional para ver cómo se obtiene a partir del simple fruto del cacao.
En la zona de Museo conocernos los utensilios que a lo largo de la historia han sido empleados para elaborar chocolate. Desde los más rudimentarios y primitivos hasta los que son usados hoy en día.
En la zona de la Fábrica veremos cómo se elabora el chocolate.
Nada más entrar nos darán una pequeña explicación a modo de introducción sobre la historia del chocolate, su proceso de elaboración y los utensilios que hacen falta para elaborarlo. Nos regalan un grano de cacao, porque según dicen, da suerte llevarlo encima, en el bolso o en un bolsillo.
Tras ello se proyecta un vídeo en el que se nos explica lo que posteriormente vamos a ver en el museo.
A continuación se inicia la visita en la planta baja. En la que empezaremos observando los más primitivos utensilios y la maquinaria más arcaica que a lo largo de la historia se ha empleado para elaborar el chocolate. Esta parte de la visita es guiada y podremos recibir mucha información y hacer las preguntas que consideremos necesario.
Resulta de los más interesante observar esas maquinas tan antiguas, que empezaron a usarse en el siglo XIX en esta fábrica, como la tostadoras de cacao, descascarilladoras, pastadoras, máquinas emulsionadoras….
Tras ello subimos a la primera planta, que es es en realidad una balconada abierta en el centro al piso inferior. Se halla totalmente rodeada de estanterías y vitrinas en las que podremos observar curiosos objetos, no sólo relacionados con el chocolate sino también otras antigüedades destinadas a un uso doméstico que nos van a sorprender, así como una amplia biblioteca relacionada con el chocolate, muchas fotografías y otros documentos. En esta parte del museo, la visita no es guiada, por lo que podremos recrearnos el tiempo que queramos contemplando las vitrinas.
Cuando acabemos, accederemos a la fábrica de chocolate Comes. Ésta fue fundada en el año 1870 y desde entonces siguen elaborando chocolate y haciéndolo con el mismo método artesanal. Allí nos estarán esperando para proseguir con la visita guiada.
Os llamará especialmente la atención cómo se elabora el llamado chocolate a brazo o a la piedra allí mismo y podréis probar a hacerlo vosotros mismos, e incluso degustarlo.
Breve historia del chocolate
El chocolate fue conocido por los primeros descubridores españoles en suelo americano.
Era una bebida muy apreciada, considerada de dioses y elaborada por los Mayas ya en el siglo IV a. de C.
Los aztecas le daban tal valor, que incluso lo utilizaban como moneda ce cambio.
En sus orígenes se elaboraba mezclando el cacao con especias, vino o maíz, dando lugar a una bebida amarga que generalmente se tomaba fría, como estimulante o afrodisíaco.
Cuando ya llega a España, en el siglo XVI se le empieza a añadir azúcar y se hace muy popular sobre todo entre las clases más pudientes.
A partir del siglo XVII van naciendo las primeras fábricas de chocolate europeas y en EEUU.
El chocolate Comes
Es elaborado por esta familia desde el año 1870 con una técnica artesanal que ha ido pasando de generación a generación.
Sus chocolates son elaborados en la misma fábrica y también se ponen a la venta en un pequeño mostrador que encontramos junto a la entrada. Allí podremos encontrar chocolates de muchas variedades, así como otros derivados del cacao. Destacan tanto los tradicionales chocolates a la piedra como los extrafinos, que son los que más se consumen en la actualidad. También encontraremos chocolates a la taza y varios frutos secos cubiertos de chocolate, así como subproductos del cacao, como s la manteca, la cascarilla o el propio cacao en polvo, que son muy empleados en repostería y en tratamientos de belleza.
Por otro lado, nos comentaron que se van desplazando por toda la comunidad valenciana, exponiendo y vendiendo sus productos en ferias medievales, gastronómicas, mercadillos, etc.
En Valencia es muy típico el Bollet, que es un chocolate tradicional de la zona y que por supuesto es elaborado en esta fábrica. Para hacerlo se tuestan las semillas de cacao en una sartén con agujeros removiéndolas hasta que la piel se desprenda con facilidad. Luego se muelen en el metate, que es una piedra de granito con forma de silla que es previamente calentado. Se va trabajando con el rodillo hasta que resulta la pasta de cacao. A ésta hay que añadirle azúcar ya que es muy amarga, también se le pone harina de arroz y vainilla. Se van haciendo cilindros de chocolate con la ayuda de papel de estraza y se deja enfriar. Luego se procede a envolverlo en papel y ya está listo para ser comercializado.
Datos prácticos
El horario para la visita del Museo del chocolate de Sueca es:
- De Lunes a Viernes: de 10:30 a 13:30 y de 16:00 a 20:00
- Sábados: de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00
- Domingos: de 12:00 a 14:00 (Domingos de agosto cerrado)
- Festivos: consultar
En cuanto a los datos de contacto son:
Museo del Chocolate
Calle Sant Josep, 29
46410 – Sueca – Valencia
Teléfono: 96 170 19 42
Fax: 96 203 40 40
info@chocolatescomes.com
¿Merece la pena visitar el Museo del Chocolate de Sueca?
Merece la pena conocer este pequeño museo en Sueca, por su dedicación al trabajar el cacao, dando como resultado uno de los mejores chocolates artesanos que podemos probar, el chocolate de Comes.
La localidad de Sueca se encuentra muy cerquita de Valencia, apenas se tarda 30 minutos en coche, y de verdad que es interesante acercarse hasta allí y conocer este instructivo museo.
Es un museo muy cuidado, desde su fachada de piedra con su gran portón de madera y la campana a la que tendréis que llamar para entrar, hasta el interior, que consigue transportarnos a otros tiempos.
Es un disfrute ver todas la herramientas, utensilios y máquinas que han sido usados desde siempre para elaborar el preciado chocolate y muy curioso contemplar la colección de libros, fotografías, documentos y otros objetos que han recopilado relacionados con el mundo del chocolate y el cacao.
El complemento ideal a esta visita, es poder pasar a la fábrica y recibir una explicación, con todo lujo de detalles, de cómo se elabora de manera artesanal el rico y dulce chocolate, y el remate es ya comprar alguna de sus especialidades en su pequeña tienda. Nosotros no pudimos resistirnos y nos llevamos unos cuantos.
Si vais con niños os aseguro de que les va a encantar, aprenderán mucho sobre el chocolate y el cacao, tendrán la oportunidad de hacerlo ellos mismos y de degustarlo. Una dulce visita que no os debéis perder.
Ingeniero de Telecomunicaciones y viajero incansable, trato de descubrir la historia y belleza de cada rincón del lugar que visito, por simple o sencillo que pueda parecer para dar a conocer al mundo sus secretos. ¿Te gusta viajar? Acompáñame en este viaje y disfruta conmigo del mundo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia en el lugar visitado, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos. Si tú también quieres contar tu experiencia, puedes escribirnos un mensaje.
