Fuengirola es una ciudad que se puede visitar en cualquier época del año por el maravilloso clima que la protege. En una de las zonas más bonitas de toda Andalucía, como es la Costa del Sol, se encuentra Fuengirola, un ciudad tranquila y con una playa inmensa, mejor dicho varias playas consecutivas.
Casi como punto final, su castillo de Sohail, guardián de la ciudad en tiempos más revueltos. Una ciudad relativamente joven, sin demasiada historia, pero con un presente y un futuro turístico excepcional.
Muy cerquita de Málaga, comunicada con Fuengirola directamente por autovía y tren, que le permite que lleguen hasta ella, hasta Fuengirola, turistas de todas partes. Cuenta con varias líneas de autobuses y un tren de cercanías por si no te apetece coger el coche.
La población: tiene un censo más de 6.000 habitantes, pero está claro que en verano esa cifra ya no es posible, y es que se supera con creces por la llegada de gente de muchos puntos de España que encuentran en esta ciudad diversión, playas, hoteles, y la posibilidad de visitar otros lugares también cercanos con un encanto especial como por ejemplo Benalmádena, Mijas, Málaga, Torremolinos, Marbella y un largo etc., etc….
He de deciros que es una ciudad genial en invierno, en la que se vive fenomenal, tiene de todo y lo poco que no tiene justo allí, llegas en nada porque está fenomenalmente comunicada. Es una ciudad muy viva en la que siempre se están haciendo cosas. Destacables la feria que empieza ahora y la feria de los pueblos, algo digno de ver. Y, por supuesto, su playa…que no sabéis lo que la echo de menos.
En verano también está muy bien, de hecho se llena de gente, aunque puede que para vosotros este aspecto sea negativo, pero aún así es un sitio muy agradable para ir de vacaciones, sobre todo si teneis críos, ya que hay un montón de cosas pensadas para ellos. Y aquí debo destacar el zoo, único en europa y que abre por la noche para poder apreciar la vida de los animales nocturnos.
El comercio y servicios: hoteles de todas las categorías, restaurantes, chiringuitos, comercios de todo tipo, etc. se distribuyen a lo largo de sus más de 13 km. de costa. Aunque es en Los Boliches, donde se empieza a concentrar la parte comercial, finalizando en lo que en sí es la pequeña población de Fuengirola, con su límite del río del mismo nombre.
Las noches en Fuengirola: llega la hora de la «marcha», ¿dónde podemos ir?. Bien, pues desde la animación que, en el propio hotel donde estemos hospedados, podemos encontrar, hasta lo que podemos descubrir si nos acercamos al centro de Fuengirola: el ambiente que se respira en sus bares y cafeterías más céntricas, al lado de la plaza de la Constitución; un paseo por el puerto y el complejo Las Palmeras; también hay salas de fiesta donde puedes escuchar flamenco o música variada en vivo y en directo. La noche es joven en Fuengirola.
Algo que no se puede dejar de ver es el castillo Sohail, de construcción árabe y que en verano se utiliza para hacer conciertos. Por otro lado está el zoológico, situado junto a la plaza de toros. Y si tenéis la suerte de estar para sus fiestas patronales, como son la Feria de Los Boliches en honor a la Virgen del Carmen, o la que se celebra en octubre en honor de la Virgen del Rosario y su popular romería.
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