Cuando hablamos de Nueva York, normalmente nos referimos a Manhattan. Y es que, para qué engañarnos, es en esta parte de la ciudad donde se encuentran los mayores atractivos que ofrece esta ciudad a los viajeros.
Y como no, a la hora de ir de compras, es en Manhattan donde podemos encontrar lo mejor de lo mejor.
Contenido de la Guía
Un poco de información de Manhattan
Manhattan con su imponente infraestructura es uno de los lugares mas impresionantes del mundo, pertenece geográficamente a New York, Estados Unidos de Norte America, he estado en Manhattan en dos ocasiones he llegado en vehículo y en otra ocasión en tren, se encuentra ubicado en el norte de New York, es uno de los cinco boroughs que forman la ciudad de Nueva York.
Las luces y el colorido es impresionantes que junto a los turistas del mundo entero los que convergen allí con un solo objetivo, apreciar su belleza y llevar unas cuantas fotos para recordar la emoción que se siente al estar allí.
Principales monumentos de Manhattan
Manhattan esta dividido en dos áreas, Uptown y Downtown
Entre los principales monumentos tenemos el Times Square.
- El Empire State
- el American Museum of Natural History
- Metropolitan Museum el Central Park
- También la Quinta Avenida que es la parte donde se concentra la zona comercial.
Es muy recomendable contratar una excursión guiada por el Alto y Bajo Manhattan para no perderse nada de la ciudad.
Mi experiencia en Manhattan
Nada más bajar del avión supe que me enamoraría de Manhattan. Y así fue. La gente es muy cálida y acogedora, todo el mundo habla español ( y cuando digo todo el mundo, quiero decir TODO EL MUNDO). No tuvimos ninguna dificultad a la hora de comunicarnos.
¿Lo mejor? Sin duda el Rockefeller Center. Subir vale 22 dólares por persona (también está incluido en el New York Pass), pero merece la pena. Lo peor? El Empire State. Si visitáis Nueva York, no subáis al Empire State. Vale 35 dólares por persona, ves exactamente lo mismo que desde el Rockfeller. Es bonito pero desde abajo.
El metro es muy bueno, tiene muchas lineas, es un poco viejo y a primera vista puede impactar un poco, por su estado. Pero funciona perfectamente. Tiene lineas hasta Brooklyn. Mi marido y yo utilizamos mucho el metro y nos fue genial.
Otra cosa. si bien es verdad que cuanto más tiempo puedas quedarte, mejor, he de decir que nosotros vimos todo (todo lo importante, lo tipico) en 4 días. Es verdad que a las ocho de la mañana ya estabamos andando por Manhattan, pero nos dio tiempo perfectamente.
Ultimo apunte: NO VAYAS EN VERANO! Fuimos en julio, hace un calor que te puedes morir. Hay una humedad impresionante. El primer día mi marido casi se desmaya! La mejor epoca: abril, mayo, octubre. Pero eso sì….tienes que ir a Nueva York una vez en la vida!
Museo Whitney de Arte Estadounidense
La familia Vanderbilt, de mega-supermillonarios, tenía enormes intereses en el transporte, a través de líneas de ferrocarriles y de compañías navieras y más tarde en el negocio de la construcción, en el propio Nueva York, siendo unos de los más importantes promotores e impulsores del Upper East Side de Manhattan, en donde se encuentra la Quinta Avenida (¿os suena este nombre, no?).
Pues bien, y volviendo al tema que nos interesa. En este soberbio museo, situado en un lugar muy cómodo, en la Madison Avenue muy cerca de Central Park, está la más increíble y soberbia colección de pintura norteamericana del siglo XX, con nombres como Warhol, Calder, Jasper Jons y Koonig. Pero para mí hay, entre ellos y respetando todos los gustos y sensibilidades, un nombre que brilla con luz propia, por encima de todos. Este nombre es el Edward Hopper.
La colección de Hopper en el Whitney es realmente soberbia, y lo es por una razón fácilmente comprensible: Josephine (Jo), la mujer del pintor, donó a su muerte, ocurrida solo diez meses después de la de su marido (1967 y 1968), toda la obra que había quedado en sus manos: una muy amplia colección que allí está, para nuestra contemplación y nuestro disfrute.
No voy aquí a descubrir la figura de Hopper, ni a hacer un examen critico de su obra, para lo que en absoluto estoy preparado. Libros e Internet lo van a hacer mucho mejor que yo a cualquier persona interesada en este tema.
El objeto de esta opinión es, simplemente, animar a quien vaya a Nueva York a ver la colección, y el resto del museo, por supuesto.
Se ha dicho que Hopper es uno de los grandes maestros de la iluminación, y de la iluminación artificial en particular, como puede comprender fácilmente quien contemple su cuadro «Nighthawks», («Noctámbulos» o «Halcones Nocturnos», como queráis) del que incluyo una imagen entre las situadas al pie de la opinión. Este lienzo ha sido un auténtico icono para muchas generaciones de norteamericanos que, durante décadas, han colgado su póster en sus habitaciones de estudiantes, bien en su casa, bien en las clásicas residencias de los «campus» universitarios.
Este cuadro, para mi desgracia, no esta en el Whitney, sino en Art Institute of Chicago, ciudad en la que nunca he estado pero que espero visitar algún día con el objetivo fundamental de ponerme frente a frente con esa maravilla.
Toda la soledad, todas las incomunicaciones de este mundo están presentes en este sobrecogedor cuadro.
El espectador -colocado fuera de «la vitrina»- puede recrearse en la escena, en donde no hay acción, solamente hay una situación, una instantánea. Las personas en el interior de esa jaula de cristal están absolutamente solas, absolutamente incomunicadas, entre ellas y con el mundo exterior.
Otra de las imágenes que incluyo: «Casa Junto a la Vía» (House by the Railroad), reproduce un óleo (más fácil de ver que el de Chicago pues se encuentra en el propio Nueva York, en el MOMA) en el que el protagonista absoluto es un fantasmagórico edificio que fue utilizada por Hitchcock como modelo para la casa de su película Psicosis, ¿la recordáis?.
En España, que yo sepa, solo se encuentran cuatro obras de Hopper y que cuelgan en las paredes del Thyssen, en Madrid. Se trata de «El Marta Mckeen» -precioso y luminoso tema marinero-, «Muchacha cosiendo a máquina» -que me llama menos la atención-, una acuarela «La Casa Lombard» -que nunca he llegado a ver- y «Habitación de Hotel» -absolutamente magnífico- y reputado como una de las mejores obras del artista. Cuidado con este último pues muchas veces no se puede ver por ser objeto de continuas peticiones de otros museos, como elemento de intercambio, para sus propias exposiciones.
Si alguien que todavía no conozca el Thyssen va al museo que no se pierda la contemplación de este cuadro, me agradecerá el consejo.
En el propio Thyssen pudo verse a finales del 2005 una exposición de Realismos Modernos en donde hubo expuesta también alguna otra obra de Hopper. Desgraciadamente, por motivos que no hacen al caso, no pude ver dicha exposición.
Muchos otros cuadros de Hopper en el Whitney producen también una impresión imborrable: «A Woman in the Sun», «Railroad Sunset» «Cape Cod Sunset «, «South Carolina Morning», «Second Store Sunligth» que es una colorista y luminosa introspección sobre el paso del tiempo y de la belleza, sobre la juventud y la vejez, y tantos y tantos más.
En definitiva, un museo que «hay que ver» en Nueva York. Su cómodo y céntrico emplazamiento -cerca de todas las partes- hace imperdonable el que no lo visites en tu próximo viaje a la manzana.
Y un consejo, hablando de hoteles y del museo. Me voy a permitir recomendar un hotel (que no es el Ritz y que está un poquillo envejecido, pero tampoco está mal), situado a menos de un kilometro del Withney, kilómetro que se pueden recorrer mediante un agradable paseo por Park Avenue, hasta la misma puerta del museo. Se trata del «Helmsley Park Lane», en la 59 justo pegado al borde sur de Central Park, en un emplazamiento muy estratégico.
No es que sea barato (todos los hoteles en Nueva York son caros) pero la habitación normal está del orden de los 300 $ por noche y además suele haber buenas ofertas. Y tal como está el cambio del dólar, pues… «Give me two»….
Algunos consejos a la hora de comprar en Nueva York
Sin lugar a dudas, a la hora de comprar artículos de electrónica y fotografía, la tienda que más renombre tiene es «B&H;», que está en la calle 34 con la 8ª. Por si siguen con ello, diré que la entrada del Empire State Building lleva una publicidad de esta tienda en el reverso y creo que había algún descuento.
En Macy´s, gracias al ventajoso cambio del euro con respecto del dólar, se puede comprar mucho más barato que en España, independientemente de que sean ofertas o no. En estos grandes almacenes, lo primero que se ha de hacer es ir al mostrador de información, ya que si se muestra el pasaporte, te entregan una tarjeta con la que te harán un 11% de descuento por ser de fuera de U.S.A.
Si vais a viajar durante el último fin de semana de noviembre, habéis de saber que, tras el día de «acción de gracias» o «thanksgiving», vienen unos días de rebajas que son, por cierto, las mejores del año.
Recordad: los precios en Nueva York los muestran sin I.V.A. Al precio que veamos, hemos de añadirle un ocho y pico por ciento más.
La zona de confluencia de Canal Street con Broadway (Chinatown) tiene muchas tiendas en las que es interesante comprar, por ser bien baratas, Levi´s, zapatillas de deporte de todas las marcas, zapatos de Sebago (los náuticos cuestan allí unos la mitad que aquí (unos 60 euros)).
En Chinatown, a pesar de la vigilancia, se pueden seguir comprando imitaciones de relojes y bolsos de firma. Lo que hacen es captarte por la calle o en las tiendas para que les acompañes a un lugar más apartado o a una trastienda. No hay ningún peligro ya que sólo buscan comerciar. Los modelos más baratos de reloj se pueden sacar por unos 15 dólares, pero por algunos modelos de mejor acabado pueden llegar a pedir una barbaridad. Es importante no manifestar interés en lo que nos ofrecen, sino más bien desdén, haciendo ver que eso no va con nosotros. Importantísimo: hay que regatear muchísimo y más si se tiene intención de comprar más de una cosas.
En Marshall´s, se pueden encontrar verdaderas gangas en cuanto a ropa y demás. La ropa de cama de Ralph Lauren, Tommy Hilfiger o Laura Ashley en este sitio está baratísima. En cuanto a su sección de calzado, es interesante acercarse a la zona en que está tu número y ver qué modelos tienen; hay auténticos chollos de marcas de prestigio. Ojo, porque esta tienda requiere de paciencia para llegar a encontrar cosas de nuestro gusto. Que yo sepa, hay una tienda en Harlem.
Filene´s es otra tienda del tipo de Marshall´s. Sólo se necesita paciencia y tiempo para encontrar en ella ropa de marca a precios bajísimos.
Las tiendas de ropa y complementos más de gusto europeo se encuentran en el «Soho». La parte de Broadway que atraviesa esta zona tiene gran cantidad de tiendas muy interesantes.
Todas las marcas de origen americano, son más baratas allí. Dona Karan, Ralph Lauren, Tommy Hilfiguer, Calvin Klein, Levi´s, Sebago, Banana Republic…Es mejor olvidarse de las marcas europeas a la hora de comprar allí (Camper, Tod´s, Armani, Façonnable, etc.), ya que sus precios no son nada atractivos, a pesar del poder del euro.
En cuanto a cosméticos y perfumes, tres cuartos de lo mismo. Los más interesantes para comprar allí son Clinique, Estée Lauder, La Mer…, o sea, los «made in U.S.A.».En marcas como Kanebo, Sisheido o Clarins, aunque puedan salir algo más baratas, las diferencias de precio no tienen nada que ver con las americanas. En cualquier caso, si el vuelo de vuelta es directo (sin escala en algún país europeo), lo más recomendable es comprar en las tiendas «duty free», que son más baratas que cualquier otro lugar de N.Y. y, además, no se paga el ocho y pico por ciento de impuestos.
En casi todas las tiendas, hay una sección en la que hay ropa rebajada (son cosas de las que no quedan todas las tallas o que tienen poca salida). Es curioso como en estas áreas podemos encontrar cosas más de nuestro gusto que en el resto de la tienda. Y es que nuestro gusto en cuanto a ropa, en poco se parece al de los americanos… No dejar de visitar, en este sentido, Banana Republic.
En Bloomingdales, podemos encontrar los vaqueros más de moda en este momento «Seven». Aunque puedan parecer carísimos, cuestan unos 100 euros menos que en España. Lo mismo sucede con los de la marca «Citizen of Humanity».
Olvidaos de comprar -como antaño- verdaderas gangas en gafas de sol «Ray-Ban». Desde que la marca pasó a manos italianas, se encuentran por mejor precio en cualquier óptica de España.
Las botas y zapatos de la marca «Ugg» (australianas), son también mucho más baratas allí.
Por el momento, estas son las recomendaciones que se me ocurren. Espero que sirvan de ayuda y complementen la información que ya tenéis sobre Nueva York.
Ingeniero de Telecomunicaciones y viajero incansable, trato de descubrir la historia y belleza de cada rincón del lugar que visito, por simple o sencillo que pueda parecer para dar a conocer al mundo sus secretos. ¿Te gusta viajar? Acompáñame en este viaje y disfruta conmigo del mundo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia en el lugar visitado, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos. Si tú también quieres contar tu experiencia, puedes escribirnos un mensaje.